Las cotizaciones de los principales granos operarían con tendencia a la baja, condicionadas por el clima, y se mantendrían alejadas de los precios récords alcanzados en mayo. La demanda China y de otros países del sudeste asiático impulsó las cotizaciones de Chicago, lo que llevó hace dos meses a registrar récords en los precios, pero la ralentización de las compras y factores climáticos generaron desconfianza en el mercado para seguir convalidando precios más altos en todos los granos. A ello se suma que en Estados Unidos se analiza disminuir el corte que se utiliza de maíz y soja para biocombustibles.

Con el comienzo de la cosecha de trigo del hemisferio norte, hay mucha oferta, el departamento de agricultura de EEUU proyecta una producción histórica. En el caso de la soja y el maíz la situación está centrada en el desarrollo de los cultivos en un período crítico de floración y alta sensibilidad a cuestiones climáticas. Según los especialistas, "Estados Unidos necesita este año altas producciones de maíz y soja" porque la campaña que se cierra terminó con "stocks muy ajustados".

Como está planteado, al mercado "le va a costar bastante volver a los récords de más de u$s 600 la tonelada de soja" y en el corto plazo "cabe esperar precios con oscilaciones pero dentro de los niveles actuales en promedio y, en la medida que desaparezca la prima climática que hoy tiene el precio, superemos este período crítico y nos acerquemos a la cosecha de los EEUU, probablemente tengamos niveles de precios algo menores a los actuales, siempre y cuando no tengamos un incidente climático que afecte seriamente los rindes esperados" indicaron los especialistas.

Fuente: Télam, Bolsa de Comercio de Rosario